Las acciones de los principales activos argentinos se dispararon hasta 16%. El resultado de las elecciones primarias tuvo una lectura positiva en el mercado, pero persisten riesgos en el camino hacia las generales de noviembre.
El titular del Palacio de Hacienda, Martín Guzmán, quedó en el foco de la atención tras la derrota en las PASO.
El día después de las elecciones primarias (PASO) 2021 que implicaron una contundente derrota para el Gobierno, tuvieron sus primeras reacciones en los mercados, anticipadas desde temprano con el salto de más de 20% en el llamado pre-market de las acciones argentinas que cotizan en Nueva York, que cerraron la jornada con subas de hasta 16,2 por ciento.
Los operadores venían posicionándose fuerte a la espera de una derrota del oficialismo en el primer test electoral en pandemia, con lo que el resultado más amplio de lo previsto generó una ola de optimismo inversor, con mejora en los ADRs locales que cotizan en Nueva York, los bonos soberanos y una baja del riesgo país, que cayó por debajo de los 1500 puntos básicos. A eso se sumó el alza de la Bolsa porteña y un nuevo retroceso del dólar blue.
No obstante, la diferencia de 10 puntos que le sacó la oposición al Gobierno a nivel nacional, intensifica entre los inversores las preocupaciones preexistentes sobre lo que vendrá en los próximos 60 días, hasta el 14 de noviembre cuando se llegue el turno de los comicios generales, e incluso más allá.
Eso porque los analistas descuentan que la derrota llevará al Gobierno a redoblar a la estrategia de “poner plata en el bolsillo” de los votantes para mejorar el humor social, lo que generará mayor emisión monetaria que, a la larga, presionará sobre el dólar y la inflación.
Como se informó , la Casa Rosada ya tenía en carpeta varias herramientas para lanzar apenas pasadas las PASO. Ahora, se espera una segunda ronda de medidas de impulso fiscal “que serían más generosas de lo que se preveía, con su consecuente impacto sobre las necesidades de financiamiento vía emisión monetaria, entre otras cosas”, explicó Lorena Giorgio, economista jefe de la consultora Equilibra.
El mercado reaccionaba en alza ante el resultado de las elecciones PASO 2021.
Para Ricardo Delgado, director de Analytica Consultora, el ajuste que se hizo en los primeros siete meses le da margen al Gobierno para reforzar el push electoral, la inyección fiscal a la masa salarial, en su apuesta hacia las elecciones de noviembre,
Volcar más pesos a la calle, en tanto, reforzará las presiones devaluatorias contra la moneda local, recalentando el dólar blue y los financieros. Desde la Rosada se buscará evitar cualquier salto abrupto del dólar, aun a costa de seguir perdiendo reservas del Banco Central (BCRA). Por eso, si bien no se espera gran volatilidad, la calma del paralelo es vista como transitoria.
Si la presión sobre el dólar es muy sostenida, la autoridad monetaria puede reforzar aún más el cepo cambiario, tras el torniquete sobre los dólares financieros que rige desde hace un mes.
Delgado considera que el acceso a dólares ya es muy limitado, pero que el Central todavía tiene margen para seguir endureciéndolo, en caso de necesitarlo y aunque recienta la actividad económica. “El dólar futuro esta en cero, puede limitar el acceso al mercado de cambios a los importadores, aunque eso implique menor rebote económico porque la importación de insumos es clave para eso. No es lo deseable, pero puede afinar los instrumentos para que la escasez de dólares se note menos”, planteó el economista .
Qué medidas tomará el Gobierno y qué prevé Martín Guzmán
Como sucede con cada elección que se pierde, un gobierno -cualquiera sea su signo- intenta reponerse y apostar a modificar la situación en la elección siguiente. A 60 días de ese desafío, el Gobierno reafirmó el rumbo y remarcó que buscará “consolidar la recuperación de la economía, que ya se siente aunque de manera heterogénea”, dijo este lunes el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.
Sin cambios en la economía a la vista, tras las PASO creció la expectativa de algún gesto político: un recambio de nombres en el gabinete nacional que sirva para “oxigenar” y llegar mejor preparados a la elección definitiva. Entre los empresarios, analistas y operadores, Cafiero, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y su par de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, aparecían como “números puestos”.
El jefe de ministros, no obstante, desestimó esos rumores y reafirmó que será la recuperación económica la tarea por delante al interpretar que esa es la demanda insatisfecha a la que se refirió el presidente Alberto Fernández en su discurso luego de la derrota.
“Es con Martín claramente. Hoy no está en discusión que haya cambios de nombres. Claro que el Presidente siempre tiene su elección para seleccionar a sus colaboradores”. respondió Cafiero a FM Urbanaplay cuando fue consultado sobre la continuidad del ministro.
El propio Fernández dejó al mediodía un mensaje en ese sentido: compartió escenario con Kulfas para presentar el proyecto de ley de Compre Nacional de insumos para el Estado, por el que se estima se ahorrarían US$500 millones anuales de divisas por sustitución de importaciones. A la vez sentó en primera fila a Cafiero, Guzmán y a la primera dama, Fabiola Yáñez.
La iniciativa, presentada junto a empresarios y al sindicalista Antonio Caló, forma parte de cinco ejes para la reactivación, que el Gobierno viene trabajando con distintos sectores. En esa misma estrategia, de responder a “demandas insatisfechas”, se enmarca también la nueva ley de Promoción de Inversiones Hidrocarburiferas, sostienen en distintos despachos oficiales. El nuevo régimen para la actividad petrolera será presentado este miércoles en la Casa Rosada. Estará a cargo del jefe de Estado y del secretario de Energía, Darío Martínez.
Por lo pronto, en el Palacio de Hacienda se concentran por estas horas en tres eventos clave de los próximos días. Por un lado, este martes el Indec difundirá el dato oficial de inflación de agosto, que Guzmán adelantó estará por debajo de 3% y que, espera, marcará el segundo mes de desaceleración de los precios.
En tanto, para el miércoles 15 se espera conocer los detalles del proyecto de Presupuesto 2022, que ingresará ese día al Congreso. En esa iniciativa, en el cual la Casa Rosada reformulará las expectativas 2021 de inflación (del 29% original) y el crecimiento de la economía que ya lo recalculó de 7% a 8% ante la reactivación heterogénea. También se conocerán las variables macroeconómicas más importantes para el año próximo: precios, PBI, déficit fiscal, tarifas, dólar y el precio de la soja, entre otros parámetros.
El otro hito será el próximo miércoles 22, cuando Argentina deba pagar el primer vencimiento de capital al Fondo Monetario Internacional (FMI) por unos US$2000 millones. El compromiso se cancelará con reservas tras el giro de los “fondos pandemia” que hizo el propio organismo el pasado 22 de agosto. Al menos eso aseguraban en el Gobierno antes de las PASO.
Pagar ese compromiso con el FMI, por el préstamo de más de US$45.000 millones, es una de las condiciones para avanzar hacia un nuevo programa con el organismo que comanda Kristalina Georgieva, en el que el Gobierno busca extender los plazos más allá de lo que permite el propio reglamento del Fondo, a la vez que se eliminen las sobretasas que cobra el ente.