Según los expertos, el motor de búsqueda abonaría esa suma a la firma de la manzana este año para quedarse con esa posición.
Google paga a Apple todos los años miles de millones de dólares para que el buscador sea la opción predeterminada en el navegador Safari un acuerdo que están en el punto de mira de las autoridades regulatorias.
El año pasado, Google pagó 10.000 millones de dólares para ser el motor de búsqueda en Safari, importe que podría incrementarse hasta los 15.000 millones de dólares, según el último informe de la empresa Bernstein.
En este informe, destinado a inversores, Bernstein afirma que en los próximos años, este importe podría seguir incrementándose y alcanzar una cifra entre 18.000 y 20.000 millones de dólares para 2022. Esta empresa basa sus predicciones en datos procedentes de «revelaciones de los archivos públicos de Apple así como de un análisis de los costes por adquisición de tráfico (TAC por sus siglas en inglés) de Google.
Para Apple, implica ofrecer el buscador más popular y completo (por más que sume alternativas como Bing o DuckDuckGo). Para Google, es monopolizar las búsquedas de unos mil millones de usuarios, sea para dirigirlos a sus servicios, sea para tener la información precisa de qué cosas están buscando y dónde, y complementarlas con la información que ya obtiene de los 3000 millones de dispositivos con Android que hay activos en el mundo.
Sin embargo, el acuerdo entre Apple y Google podría toparse con dos grandes problemas. En primer lugar, las autoridades regulatorias están pendientes de este acuerdo, ya que limita las opciones de otros buscadores en base a quien más dinero pone en cima de la mesa. Aunque el riesgo regulatorio no es inminente es probable que se haga en los próximos años.
El segundo riesgo de este acuerdo es que Google no esté dispuesto a revisar su acuerdo. En este sentido, si tenemos en cuenta que los beneficios netos de Google en 2020 fueron de 40.270 millones de dólares, la cifra que tiene que pagar todos los años supone una auténtica barbaridad para las cuentas de Google, siempre y cuando las cifras que siempre se han manejado sean ciertas, algo que podemos poner en duda teniendo en cuenta los beneficios de Google.