Durante la jornada confirmaron 3.610 infectados y 121 nuevos fallecimientos. El total de casos asciende a 1.469.919 y las víctimas fatales suman 40.009.
El Ministerio de Salud de la Nación informó este martes que durante las últimas 24 horas se registraron 121 muertes y 3.610 nuevos casos positivos por coronavirus. Con estos datos, el total de infectados en todo el país asciende a 1.469.919. Después de 280 días del primer contagio, Argentina llegó a las 40 mil muertes (40.009) por COVID-19.
El pasado 19 de marzo, el presidente Alberto Fernández anunció una cuarentena estricta con el objetivo de “planchar la curva” de contagios antes de que el virus lograra expandirse por todo el país.
A pesar de las reiteradas medidas que extendieron el aislamiento, el país atravesó un brusco aumento en sus datos promediando el mes de julio. El 23 de ese mes se registraron 6.217 contagios en una sola jornada. Hasta aquel día en Argentina se habían contabilizado 2.702 muertes.
El 14 de agosto la cifra de fallecimientos se había multiplicado (5.527). La suma fue acrecentándose de a cientos por día y la barrera de las 10 mil muertes se traspasó el 7 de septiembre. El 1 de octubre ese número ya estaba en 20.287; y fue el 28 de ese mismo mes, después de 222 días de cuarentena, cuando en el país se registraron más de 30 mil víctimas fatales por COVID-19. 41 días más tarde la estadística volvió a derribar otro límite, el de los 40 mil decesos.
Del total de muertes de este martes, 76 son hombres (24 residentes en la provincia de Buenos Aires, dos en la ciudad, ocho en Chaco, dos en Chubut, 13 en Córdoba, cuatro en Corrientes, tres en Entre Ríos, uno en La Rioja, uno en Mendoza, uno en Río Negro, uno en Santa Cruz y 16 en Santa Fe) y 44 son mujeres (15 residentes en la provincia de Buenos Aires, dos en Chaco, dos en Chubut, seis en Córdoba, cinco en Corrientes, tres en Entre Ríos, una en Mendoza, una en Neuquén, una en Río Negro, una en Santa Cruz, cinco en Santa Fe, una en Santiago del Estero y una en Tierra del Fuego).
En las últimas 24 horas fueron realizados 13.302 testeos y desde el inicio del brote se realizaron 4.124.441 pruebas diagnósticas para esta enfermedad, lo que equivale a 90.893 muestras por millón de habitantes.
En la actualidad, según el reporte del Ministerio de la Nación, son 3.715 las personas internadas en Unidades de Terapia Intensiva (UTI). En lo que respecta a los porcentajes de ocupación, a nivel nacional es del 54,4%, mientras que en el AMBA es de 58,2%.
De los 3.610 casos, 836 son de la provincia de Buenos Aires, 159 de la ciudad de Buenos Aires, 12 de Catamarca, 59 de Chaco, 121 de Chubut, 27 de Corrientes, 241 de Córdoba, 137 de Entre Ríos, cuatro de Formosa, nueve de Jujuy, 62 de La Pampa, siete de La Rioja, 32 de Mendoza, 11 de Misiones, 477 de Neuquén, 137 de Río Negro, siete de Salta, 107 de San Juan, 87 de San Luis, 238 de Santa Cruz, 558 de Santa Fe, 23 de Santiago del Estero, 65 de Tierra del Fuego y 93 de Tucumán.
Esta mañana, el viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, llamó a realizar un “autoasilamiento de diez días” antes de las fiestas de Navidad y Año Nuevo como una medida para evitar contagios por coronavirus y cuidar a las personas de riesgo dentro de las familias.
La sugerencia la había adelantado el propio gobernador bonaerense, Axel Kicillof, quien indicó: “Si uno ya sabe que se va a reunir con parientes de más de 60 años, que es población de riesgo, que los 14 días previos evite tener todo tipo de reuniones como para no contagiarse. Una suerte de cuarentena previa que nos permita llegar sanos a Navidad y Año Nuevo”.
Por otra parte, en la ciudad de Buenos Aires comenzaron los controles y testos para detectar eventuales casos de coronavirus entre turistas, no residentes que tengan previsto permanecer más de un día en el distrito y residentes que regresan después de tres días.
En cuanto a la vacuna contra el coronavirus, los expertos de Oxford (Reino Unido) publicaron este martes, por primera vez, las conclusiones de sus pruebas clínicas, convirtiéndose en la primera vacuna contra el COVID-19 que publica los resultados de sus estudios de fase III para la revisión de sus pares. Las pruebas arrojaron que ninguo de los vacunados requirió hospitalización ni padeció “enfermedad severa”.